Ciudad de México, 12 octubre 2021.- (REDACCIÓN / CDMX MAGACÍN). –A consecuencia de hechos ocurridos el pasado mes de septiembre en el recinto de Donceles, las diputadas y diputados de distintas fracciones parlamentarias, se pronunciaron por hacer del Congreso capitalino un recinto de respeto y no ejercer violencia de género.
Por lo que tomarán los cursos necesarios sobre igualdad de género y nuevas masculinidades que imparten las instituciones en materia de Derechos Humanos de la Ciudad de México.
También anticiparon que desde la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) se impulsará que, todos los trabajadores sean capacitados y sensibilizados en este tema.
Por su parte el diputado Héctor Díaz Polanco, presidente de la Mesa Directiva, adelantó que se solicitará a la Comisión de Derechos Humanos y a la Secretaría de las Mujeres de la Ciudad de México su intervención para brindar las capacitaciones necesarias para todo el personal de la II Legislatura del Congreso de la Ciudad de México.
Sin embargo, a los pocos minutos de que los legisladores hicieran públicas las declaraciones, constaté que las medidas propuestas no son más que “buenas intenciones”, o bien, no aplican para todos.
A propósito de del tema mencionado, Graciela Tenorio periodista del Periódico LEO narró lo siguiente:
“Sucedió que al encontrarme el pasado 7 de octubre al interior del Pleno, grabando el desarrollo de un debate, un elemento de resguardo se acercó directamente a mí para tomarme del brazo y decirme que tenía órdenes de moverme fuera del Pleno porque no podía estar ahí…lo que cuestioné de inmediato para saber de dónde venían las órdenes; su respuesta fue que “eran órdenes de la Dirección de Servicios…”
Y dijo que es necesario hacer del conocimiento público, que desde que se reanudaron las sesiones presenciales, el acceso a Medios de Comunicación ha sido especialmente controlado.
“Pues quienes cubrimos las actividades legislativas hemos notado que las medidas de acceso son más rígidas para reporteros, fotógrafos y camarógrafos que no pertenecemos a la base de trabajadores del Congreso local, o colaboradores de algún diputado; por lo que tuvimos que acreditarnos en tiempo y forma en la oficina de Comunicación Social para que nos permitieran pasar a 20 personas de los diferentes medios de comunicación”, expresó-
Y a remarcó que a pesar de cubrir con el requisito del, “Protocolo actualizado para la realización de sesiones presenciales del H. Congreso de la Ciudad de México II Legislatura” emitido por el presidente de la Mesa Directiva; y de tener la acreditación por parte de la oficina de Comunicación Social, las instrucciones constantemente, estando a disposición de lo que se les ocurra hacer en el momento, sobre todo, en los momentos álgidos de debate.
“Debo mencionar que los directores de resguardo y de servicios del Congreso local pertenecen al grupo político de los diputados Carlos Hernández Mirón y Xóchitl Bravo Espinosa, quienes, además, cuentan con personas de su mismo equipo en Servicios Parlamentarios, y a ellos sí pueden visitarlos sin restricción alguna, colaboradores y operadores políticos”, dijo.
Sostuvo que con estas acciones parece que no basta pertenecer a la fracción de mayoría, también quieren mantener control total de todas las áreas que permiten la operación del Congreso CDMX, y poder dar sólo su versión de los hechos y acontecimientos derivados de las obligadas sesiones que deben realizar.
“Por lo tanto, manifiesto que: como mujer, y periodista, estoy expuesta a que la violencia velada crezca contra de mí por hacer mi labor de informar a la ciudadanía y afirmar que las buenas intenciones no garantizan la no violencia de género en este espacio legislativo”, concluyó.