Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
El diputado federal de Morena, Víctor Hugo Lobo Román perdió doble. Primero, fracasó en su intento por arrebatarle el PRD Ciudad de México a Nora Arias. Esa derrota le hizo extraviar la cordura y ahora optó por atacar a las instituciones.
Lobo Román envió este martes a su chofer, Mario Tripp Reyna a bloquear las instalaciones del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), para exigir dinero. Sí, quieren que les entreguen las prerrogativas del PRD Ciudad de México, sin que tengan atribución alguna para recibirlas, porque no son siquiera militantes del partido. Por eso la verdadera dirigencia se deslindó de la toma del edificio.
Toda esta historia del PRD CDMX evidencia el talante de “ambicioso vulgar” –expresión típica de morenistas– de Lobo Román. También su nepotismo, porque ha pretendido arrebatar el control del organismo político para dejar a su hijo, Alan Lobo Rodríguez –quien jamás ha militado en el partido–, como presidente del Comité Estatal, el máximo órgano partidista.
En el nepotismo aparece su otro hijo, Víctor Hugo Lobo Rodríguez, a quien le consiguió una diputación en Morena, a la que llegó por la puerta trasera, como suplente. El propietario de esa candidatura plurinominal es Gerardo González, también empleado del papá desde hace muchos años. Por cierto, Omar Tripp, hermano de Mario, el que encabezó la toma de las instalaciones del IECM –disfrazados de amarillo–, es el diputado suplente de Lobo Román. Aunque son de Morena, todos iban disfrazados de amarillo.
Tanto Mario como Omar Tripp Reyna obran como imputados en la carpeta de investigación CI/FICUH/UAT-CUH-7/UI-1S/D/00529/04-2025, iniciada tras la denuncia de dirigentes legales y legítimos del PRD CDMX, por el despojo del inmueble de Jalapa 88, que es la sede del partido, allanada desde hace más de medio año.
Lobo Román está confabulado con el enterrador del PRD nacional, Jesús Zambrano. Ambos utilizan prestanombres para no dar la cara. Lobo Román pretendía colocar como secretaria general a su secretaria, Karla Celis; Zambrano impulsaba a la ex diputada Polimnia Romana, ambas denunciadas por despojo de la sede del PRD en Cuajimalpa, donde ocurrió un feminicidio descubierto el 15 de octubre.
Para efectos prácticos, Lobo Román está apestado en Morena. Por eso no ha sido invitado a una sola de las reuniones de los diputados federales por la CDMX.
Se ha dedicado a atacar también al secretario de Gobierno capitalino, César Cravioto, incluso con desplantes de su hijo el diputado local. En un desplegado difundido este martes, firmado por los cercanos a Lobo Román, se lanzó contra las autoridades del Gobierno de la CDMX, emanado de Morena, su partido.
Lobo Román tuvo en algún momento buena relación con Ricardo Monreal, su coordinador en la Cámara de Diputados. Por eso le concedió la presidencia de la Comisión para la Reforma Político Electoral, desde donde Lobo Román ha prometido “vida eterna” a consejeros del IECM –ante la enorme posibilidad de que desaparezca el organismo– a cambio de que le ayuden a tumbar a Nora Arias del PRD CDMX. Monreal lo respaldó en algún momento para el asunto perredista, pero cuando se percató que Lobo lo engaño, le retiró el apoyo.
Ya desde las altas esferas legislativas de Morena le llamaron la atención a Lobo Román. Le pidieron que no se meta en el tema del PRD CDMX, pero no entiende, y encima de todo se lanza contra Cravioto y contra el IECM. No acepta que fue expulsado del PRD y de la CDMX por Morena y que, irremediablemente, ya perdió su guerra –porque es suya– contra Nora Arias y el PRD CDMX. Lo veremos.
FOTO:







Discussion about this post