La alcaldesa electa se comprometió que su gobierno no se dedicará a extorsionar empresarios, pues calificó a las «mordidas» como un impuesto más que inhibe el desarrollo económico, no sólo de la ciudad, sino del país entero.
Ciudad de México, 29 julio 2021 (REDACCIÓN / CDMX MAGACÍN).- Una vez que inicie la administración de Lía Limón en Álvaro Obregón, todas las obras de construcción y desarrollos inmobiliarios tendrán que cumplir con la legislación y normativa vigentes pues su gestión se caracterizará por una política de cero moches y cero mordidas.
Durante una reunión sostenida con integrantes de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (CANADEVI), la alcaldesa electa se comprometió que su gobierno no se dedicará a extorsionar empresarios, pues calificó a las «mordidas» como un impuesto más que inhibe el desarrollo económico, no sólo de la ciudad, sino del país entero.
De tal suerte, apuntó que para obtener resultados diferentes las cosas deben hacer de otro modo, en apego a las normativas, «nos guste o no», sentenció.
Así mismo, se buscará que las compensaciones para mitigar impactos de obras de desarrollo en Álvaro Obregón no se destinen a otras demarcaciones, “pues así como la Secretaría de Desarrollo Urbano tiene su lógica, yo también, y no voy a permitir que las medidas no se queden en la demarcación y se utilicen para mejorar la infraestructura urbana de la alcaldía”.
La panista reconoce la necesidad de impulsar al sector de la construcción como una medida fundamental para la reactivación económica, pero a la par deben poner en marcha acciones para mejorar los servicios urbanos, la seguridad y la movilidad en las zonas aledañas a las obras. En ese sentido, invitó a los desarrolladores a contribuir con la recuperación económica mediante la generación de empleos para los habitantes de la propia alcaldía.
Se comprometió con los desarrolladores a establecer mesas de trabajo para ofrecer acompañamiento, dar certeza a cada uno de los proyectos, verificar requisitos y facilitar trámites de protección civil, verificaciones.
“Sobre estos temas les reitero: vamos apegarnos a la norma, con trasparencia y sin margen a la corrupción. En esa vía y esa lógica van a tener en mí a una aliada. Reconozco la importancia de la industria de la construcción, y sé que es uno de los motores del desarrollo en la ciudad”.
Limón García ponderó la importancia del diálogo con los vecinos para contrastar argumentos y posturas diferentes para alcanzar convenios favorables para todas las partes. Conjuntamente se pueden solucionar las genuinas demandas de la alcaldía en materia de vialidades e infraestructura hidráulica, que de no atenderse podrían colapsar como el Metro, en cualquier momento.
“Estoy convencida, se puede conversar y construir acuerdos desde distintos ámbitos, lo
he hecho a lo largo de mi trayectoria política y he confirmado que se pueden construir
espacios de diálogo y puntos intermedios en donde todos estén satisfechos”.