Glorieta de Colón
No queda claro a quién hay que reclamarle, si al que formalmente es el titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez, o a quien verdaderamente manda en la dependencia, el “Jefe Máximo”, el subsecretario Israel Benítez.
Lo cierto es que pareciera que de los dos no se hace uno, y son negligentes a la hora de actuar para desarticular bandas criminales que extorsionan y desatan el pánico social, como en Iztapalapa y Xochimilco en los últimos años. En días pasados, ocurrió un hecho en Coyoacán, que deberían frenar los jefes policiales de inmediato, antes de que se les salga de control.
Se trató de una balacera en la madrugada del pasado domingo en el bar “Mikali”, ubicado sobre División del Norte y la calle Circunvalación, en la colonia Atlántida. “Los informes refieren que murieron dos personas y varios jóvenes resultaron heridos”, nos recuerda el diputado panista Ricardo Rubio, quien exige a Martí Batres el gobierno actúe de inmediato para brindar seguridad en todas las demarcaciones de oposición.
En este caso, relatan, si no fuera por la actuación del alcalde Giovani Gutiérrez, la situación se habría salido de control en Coyoacán.