“Por eso nos hicieron esto, de patear la transición, para que nos den menos tiempo a revisar y puedan encubrir el cochinero, la verdad, para que nos hacemos”. Foto: Especial.
Ciudad de México, 4 septiembre 2021 (ENRIQUE SERNA / CDMX MAGACÍN).- El pasado lunes 30 de agosto, minutos antes de los acontecimientos violentos en las cercanías del Congreso de la Ciudad de México, CDMX Magacín charló brevemente con alcaldes integrantes de la UNA, entre ellos, Mauricio Tabe, de Miguel Hidalgo, quien en ese momento anticipó que de encontrar anomalías en las finanzas de las demarcaciones gobernadas por la UNA, buscarían emprender procesos legales contra quienes resulten responsables.
El panista no consideró como casualidad la reducción del plazo para la transición, pues habría poco tiempo de hacer una revisión detallada del status de la administración pública.
“Por eso nos hicieron esto, de patear la transición, para que nos den menos tiempo a revisar y puedan encubrir el cochinero, la verdad, para que nos hacemos”, recriminó ante este medio.
Otra de las razones del retaso es, dijo, “ponernos en jaque a los alcaldes”, con los vecinos tomados como rehenes, “me parece muy perverso que a los vecinos los tomen de rehenes frente a una revancha política.
La declaración cobra relevancia toda vez que este viernes, tras charlar con la jefa de gobierno, Tabe revelo que en Miguel Hidalgo, hay déficit de 83 millones de pesos, que pidió al gobierno central restituir. De ese total, más de 50 millones corresponden a energía eléctrica y el resto de otros conceptos o servicios, por lo que prácticamente se quedarían sin recursos los primeros 90 días días de gobierno.
A las puertas del Antiguo Palacio del Ayuntamiento y ante medios, dijo que sostendrá una reunión con la administración saliente para que explique por qué continúan los gastos pese a la situación económica de la ciudad.
Con la mandataria abordaron temas de reactivación económica, movilidad, seguridad, reforzamiento hidráulico y drenaje; además de coincidir con sus compañeros en que se trató de una reunión cordial, alejada de ánimos beligerantes.