López Obrador solicitó a los concesionarios ceder volúmenes de agua para uso doméstico y urbano; sin embargo, el pasado 30 de julio, bajo el argumento de seguridad nacional, expidió un decreto para atender la emergencia hídrica.
CIUDAD DE MÉXICO, 02 de agosto, (MENSAJE POLÍTICO).–Mientras el gobierno federal pretende mitigar la crisis por falta de agua en Nuevo León con un financiamiento de tres mil 581 millones de pesos; la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, en su segundo informe trimestral, revela que la Secretaría de Energía recibió un extra de 45 mil millones de pesos, y el Tren Maya 20 mil millones de pesos.
En la conferencia mañanera sobre las acciones que realizarán el Gobierno Federal, Estatal y los Municipales, el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López dijo que la Federación destinará tres mil 581 millones de pesos para aliviar la crisis por la que atraviesa la entidad.
Estos recursos para infraestructura hídrica provienen del programa “Cupón Cero” a los cuales se sumarán un mil 500 millones de pesos que el organismo operador de agua potable de Nuevo León aportará, los cuales provienen de una línea de crédito.
Cabe destacar que otras acciones que el Gobierno Federal realizará para resolver la difícil situación se encuentran una inversión de 385 millones de pesos de programas federales para la explotación de 220 pozos; financiamiento al Acueducto El Cuchillo y mil 118 millones de pesos para la presa Libertad, sin embargo, estas obras se prevén para finales del 2023, es decir, no ofrecen una solución en lo inmediato.
En la conferencia, el presidente López Obrador, solicitó el apoyo de empresarios de la Cámara de la Industria de la Transformación de Nuevo León, para terminar la construcción, en un tiempo de ocho meses, del acueducto de la Presa El Cuchillo, el cual tendrá una extensión de 100 kilómetros.
En semanas pasadas, López Obrador solicitó a los concesionarios ceder volúmenes de agua para uso doméstico y urbano; sin embargo, el pasado 30 de julio, bajo el argumento de seguridad nacional, expidió un decreto para atender la emergencia hídrica.
“Por ser causa de utilidad pública, de interés público y un asunto de seguridad nacional, se ordena aprovechar temporalmente los derechos de agua existentes, mediante la modificación o reducción provisional de volúmenes concesionados, destinados para usos distintos del doméstico y del público urbano”, establece el decreto.
Con ello, aun con la voluntad del sector industrial, que de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) sólo ocupa el 4% de agua, el gobierno federal recurrió a la figura de la seguridad nacional para suspender temporalmente las concesiones.
En este sentido, destaca la opinión del ex director de Conagua, José Luis Luege Tamargo, quien aseguró que el gobierno federal evita asignar recursos para subsidiar a los afectados por la sequía, pues hasta el momento no se ha emitido una declaratoria formal por desastre, y en su lugar, se optó por emitir un decreto por el que se tomará el control temporal de las concesiones de agua, lo que implica un daño económico especialmente al campo, sector que ocupa el 70 por ciento del total de los recursos hídricos.