Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
Durante todo el 2025, el Gobierno de la Ciudad de México deberá tener instalada una capacidad para emitir cada día, en promedio, 2 mil 740 licencias permanentes para conducir tipo “A”, pues con la reforma aprobada por el Congreso capitalino calculan que se emitirán cuando menos un millón en todo el año, lo que representará ingresos por mil 500 millones de pesos, pues los derechos costarán mil 500 pesos.
Acaso sin pretenderlo, podría ser una especie de resarcimiento para las arcas capitalinas, principalmente desde el Estado de México y de Morelos, porque se espera que miles de habitantes de esas entidades –y todas las demás– vengan a la capital del país a tramitar su licencia, para aprovechar el beneficio de que será permanente. O sea, a la inversa de que hay aproximadamente un millón de vehículos con placas de esas entidades, pero cuyos propietarios realmente habitan en la CDMX, y hacen su trámite allá para eludir pago de tenencia.
Para la expedición de la licencia de conducir en la Ciudad de México ya está contemplado que es válido también el comprobante de domicilio del Estado de México, si se trata de la tipo “A”, de acuerdo con los requisitos de la Secretaría de Movilidad, dependencia que emite ese documento oficial, que sirve para conducir en todo el territorio nacional, y también válido en muchos otros países.
La reforma, procesada en la Comisión de Hacienda que encabeza el diputado Pablo Trejo, se aprobó este miércoles por 41 votos a favor y 13 en contra –de los panistas– y establece que sólo será durante 2025 esta “promoción” de licencia permanente, una reproducción del programa que tuvo Andrés Manuel López Obrador cuando fue jefe de Gobierno, sólo que en aquel entonces duró tres años, y por fines meramente recaudatorios la canceló el gobierno de Marcelo Ebrard en 2007.
Precisamente la discusión ahora ha sido que la reforma otra vez es recaudatoria, porque no se revisaron los requisitos para obtener el documento, más allá del pago de derechos. Hasta hace menos de una década se hacía un examen de manejo, de reglamento de tránsito y médico, que incluía examen de la vista. Sin embargo, los diputados que dictaminaron esta iniciativa de la jefa de Gobierno, Clara Brugada, dejaron en claro que la Secretaría de Movilidad, así como la Comisión legislativa relativa, tendrán que hacer esa revisión de los requisitos, porque a ellos les compete. Esa misma dependencia tiene un registro de los automovilistas sancionados, y habrá quienes estén impedidos de obtener su el documento permanente, porque acumularon puntos negativos.
La licencia permanente atraerá a gente de otras entidades, algo a la inversa de lo que ocurre con los vehículos, pues se estima que unos 300 mil emplacados en Morelos son de propietarios que en realidad habitan en la CDMX. Un fraude al fisco, que inicia en las agencias de venta de automóviles, principalmente de lujo, porque ahí mismo “tramitan” los vehículos con placas de esa entidad donde no se paga tenencia, y se “ahorran” cantidades incluso superiores a los 50 mil pesos anuales.
O también cuando menos 700 mil vehículos de habitantes capitalinos con placas vehiculares del Estado de México, donde la tenencia cuesta menos, las infracciones también y es más fácil aprobar la verificación vehicular, porque en los verificentros son más corruptos.
Precisamente el de la elusión en tenencias en la CDMX es otro de los hoyos fiscales que deberá cerrar Morena, y no deberían tener pretexto porque también son gobierno en Morelos y el Estado de México. Ya es tiempo que lo hagan, pueden empezar poniendo en orden a las agencias automotrices. Lo veremos.
FOTOS: Especial / Cuartoscuro