Glorieta de Colón
Por más que Clara Brugada quiera minimizar a que un hecho de represión militar obedeció a que “dos elementos” actuaron de manera incorrecta al solicitar la intervención del Ejército para un operativo de desalojo en el Multiforo Alicia, el hecho es grave. En primer lugar, porque su policía está mal capacitada, pues ella misma reconoce que se deben revisar los protocolos para la petición de ayuda de la Guardia Nacional. O sea, otra vez el jefe de la policía, Pablo Vázquez anda en todo menos en misa. Según Brugada, los dos elementos que fallaron ya fueron retirados de su cargo, pero seguramente muy pronto serán reinstalados, pues ella misma reconoce que los protocolos no son claros, lo que evidencia otra arbitrariedad al sancionarlos. Menos mal que Brugada reconoce que “fue una desproporción”, la intervención de los militares. Por cierto, otra vez los simpatizantes de la jefa de Gobierno actúan sin pensar y se les revierte: ya estaban acusando a la alcaldesa de la Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega de haber enviado a los militares, cuando fueron los polis de Clara y Pablo.
Gobiernos están avisados
El Gobierno Federal, el de la Ciudad de México y la Alcaldía Benito Juárez ya están avisados, así de que no vayan a salirnos luego con el pretexto de que no tenían conocimiento de la voracidad de una empresa constructora en la colonia Tlacoquemécatl Del Valle, que está lastimando y corre el riesgo de matar un árbol que tiene más de 100 años de vida y goza de cabal salud. Se trata del proyecto de la esquina de Miguel Laurent y Fresas, al que le estorba el majestuoso laurel de la India de troncos múltiples y copa ancha, y al parecer ya lo afectaron con las retroexcavadoras. En este momento, la autoridad que carga toda la responsabilidad es el Gobierno capitalino, pero ahí las otras dos instancias deberían coadyuvar para salvar al árbol.
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