Glorieta de Colón
Este martes, se espera un fuerte choque entre los diputados autodenominados de la transformación, que suman 46 de los 66 en el Congreso de la Ciudad de México. Como tienen más de las dos terceras partes de los votos, no necesitan el de la oposición, y será entre ellos el arrebato de las presidencias de las Comisiones legislativas más importantes, y hasta las menos importantes, porque quien preside recibe dinero extra y personal de apoyo, nada despreciables. Las más demandadas son Presupuesto, Gobernación, Justicia, Seguridad, Puntos Constitucionales, Bienestar, Hacienda, Vigilancia, ésta última que podrían dejársela a la oposición, para no verse mal. Por eso, la mayoría opina que debería quedar en el Grupo Parlamentario del PRD, que lo conforman Nora Arias y Pablo Trejo, quien es experto en esos temas y no es mal visto por los morenistas, pues llegó al Congreso vía ese partido.
El discreto Orvañanos
Así como en la campaña por la Alcaldía Cuajimalpa tuvo que ser muy cauto ante los embates y violencia del “Grupo Dragón” de Adrián Rubalcava, el vencedor indiscutible de esa elección, Carlos Orvañanos, del PAN, hizo una reaparición después de más de tres meses de tener un perfil público sumamente discreto. Se reunió con la futura jefa de Gobierno, Clara Brugada, a menos de 20 días de que asuman su respetivo cargo. “Diálogo, respeto y coordinación”, destacó Orvañanos como “puntos de coincidencia” con Brugada, de quien dijo haber visto disposición para trabajar de la mano. La primera señal efectiva de Brugada es cómo trata a Cuajimalpa en el presupuesto de Egresos 2025.
Débil defensa de ÁO
Sigue causando intriga por qué el representante de Morena ante el INE, Sergio Gutiérrez Luna se vio tan blandengue hace un par de semanas que el Consejo General del organismo discutió y aprobó el dictamen por rebase de tope de gastos de campaña del neomorenista Javier López Casarín, para la Alcaldía Álvaro Obregón. Siempre combativo al grado de llegar a la majadería y las amenazas, Gutiérrez Luna sólo intervino en una ocasión para proteger al candidato de su partido, quien fue defendido oficiosamente más por los consejeros Carla Humphrey, Arturo Castillo y Jorge Montaño.