En octubre pasado el morenista presentó la iniciativa que buscaba tipificar esta práctica como extorsión, al adicionar una fracción IV al artículo 236 del Código Penal; la propuesta fue turnada a la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, que según dijo, tuvo una enorme carga de trabajo. Foto: Especial.
Ciudad de México, 4 agosto 2021 (ENRIQUE SERNA / CDMX MAGACÍN).- Pese al letargo legislativo prevaleciente en el Congreso de la Ciudad de México, no fue la falta de interés sino la carga de trabajo lo que impidió aprobar una iniciativa impulsada por el diputado, Nazario Norberto para sancionar a los llamados montachoques, dedicados a extorsionar automovilistas con supuestos incidentes de tránsito.
Así lo expuso el promovente y presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales e Iniciativas Ciudadanas del Congreso de la Ciudad de México, Nazario Norberto, quien buscaba sanciones de 18 años de reclusión y multas superiores a los 173 mil pesos; propuesta con la insistirá durante la II Legislatura de ese organismo.
En octubre pasado el morenista presentó la iniciativa que buscaba tipificar esta práctica como extorsión, al adicionar una fracción IV al artículo 236 del Código Penal; la propuesta fue turnada a la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, que según dijo, tuvo una enorme carga de trabajo.
“Se incluyen dichas sanciones a quien provoque intencionalmente un accidente automovilístico o emplee cualquier mecanismo o amenaza para hacer creer a la víctima que ocasionó el accidente”, refirió el legislador de Morena al señalar que según la Secretaría de Seguridad Ciudadana capitalina, el ilícito consiste en impactar un vehículo contra otro y después exigir una cantidad de dinero en efectivo para resarcir el daño.
Los montachoques provocan accidentes viales para posteriormente extorsionar a sus víctimas, que son seleccionadas mayormente porque no tienen un seguro contratado, y dicha información los delincuentes la obtienen al checar en bases de datos las placas de los vehículos. Después del percance les exigen un pago entre 15 mil y 30 mil pesos y si se niegan los intimidan, amenazan y a veces los golpean”.