Glorieta de Colón
A propósito de lo publicado en esta columna en la edición de ayer, nos proporcionaron información adicional sobre Cuajimalpa. El primer dato: el alcalde Carlos Orvañanos no le debía nada a Jesús Zambrano, el presidente enterrador del PRD, por lo que de ninguna manera debió “pagarle” designando a Fany Santiago como la directora general de Comunicación Social de la Alcaldía. En realidad, nos afirman, a quien sí le debía es a Nora Arias, presidenta del PRD en la Ciudad de México, porque ella es quien firmó su registro como candidato, pues no debe olvidarse que lo siglo el PRD, aunque también fue candidato del PAN y el PRI. La coalición, por cierto, fue signada por los líderes de los tres partidos en la CDMX, Zambrano totalmente ajeno a ello. Además, Nora Arias se la jugó fuerte con Orvañanos, incluso contra el ex alcalde Adrián Rubalcava, que para nadie es un secreto jugó muy sucio contra la oposición en las campañas. Finalmente, también nos hacen notar que a Fany Santiago no la bajaron de la lista para las concejalías en la Gustavo A. Madero por una arbitrariedad, sino porque no cumplía el requisito de residencia en la Alcaldía.
Abuso de constructora
Dicen que en todos los partidos se cuecen habas. Y así como ha habido tantos señalamientos de los abusos de las desarrolladoras inmobiliarias en la Alcaldía Benito Juárez contra los panistas, el diputado de Morena, Fernando Zárate Salgado, no repara en colores partidarios, y exige al gobierno de la Ciudad de México que supervise una obra ubicada en la calle del Secreto 23, Colonia Chimalistac, Alcaldía Álvaro Obregón. El propósito, advierte, es que informen si la construcción cuenta con los permisos requeridos para operar en esta zona catalogada como Monumento Histórico. Ojalá a él sí le respondan.
Enojo en Azcapotzalco
Tal parece que la alcaldesa de Azcapotzalco, Nancy Núñez quiere tapar el sol con un dedo. Según ella, es falso el conflicto de interés en su demarcación, como si pudiera ocultar que a quien designó como director General de Servicios Urbanos, Fernando Rosique Castillo, es padre del concejal Fernando Rosique Briceño, quien tiene la obligación de supervisar su trabajo. El directorio oficial no miente.